martes, 1 de noviembre de 2011

Mensaje de Ramón al pueblo avileño

Hace algunos días tuve el privilegio de participar en una de las actividades de la visita a nuestra provincia de Jorgito el Camagueyano, como se le conoce a "un joven discapacitado camagüeyano que ha logrado llevar a cabo sus más ambiciosos sueños gracias a la Revolución cubana", como él mismo se define, aunque, si les soy sincero, nunca la palabra discapacitado me pareció mas inexacta.

Le prometí esperar que publicara en su Blog las imágenes y recuerdos de esos días, antes de escribir yo mis propias experiencias de este inolvidable encuentro.

A la espera de ese momento, publico el mensaje que Ramón Labañino, con quien Jorgito mantiene comunicación permanente, le enviara a nuestro pueblo avileño con motivo de ese recorrido.

LUIS III MEDINA (58734004)
25/10/2011 02:51:20 p.m.
QUERIDO PUEBLO AVILENO

NOS HONRA GRANDEMENTE PODER COMUNICARNOS CON USTEDES Y HACERLES LLEGAR EL ABRAZO Y CARINO DE LOS CINCO, EN LA PRESENCIA DE QUIEN ES UN EJEMPLO DE LUCHA, SACRIFICIO Y VICTORIA: NUESTRO JORGITO.
CONOCEMOS BIEN TODO EL ESFUERZO QUE REALIZAN POR NUESTRA CAUSA, DE CUANTO ENTREGAN DIA A DIA EN LA LUCHA POR LA VERDAD Y LA LIBERTAD, Y QUEREMOS EXTENDERLES NUESTRA GRATITUD ETERNA, Y TODO NUESTRO AFECTO.
EN MOMENTOS COMO EL ACTUAL, EN EL QUE LA INJUSTICIA CRECE CON CRUELDAD SOBRE NUESTRO RENE, A QUIEN DESPUES DE LIBERAR DE LA CARCEL PEQUENA, AHORA LO CONDENAN A ESTAR EN LA GRANDE, AL NO PERMITIRLE REGRESAR A NUESTRA PATRIA, A SUS SERES QUERIDOS, A SU VIDA COTIDIANA; MIENTRAS, SOBRE GERARDO SE ENSANAN EN PERJUDICARLE TODO PROCESO LEGAL, LE PROHIBEN VER A SU AMADA ADRIANA, Y LO ENVIAN AL MAS DESPIADADO HUECO CON CUALQUIER EXCUSA, Y NOSOTROS AVANZAMOS CON EL ULTIMO RECURSO LLAMADO “HABEAS CORPUS” CON SIMILARES LIMITACIONES; LA LUCHA DE TODOS USTEDES, DE TODO NUESTRO PUEBLO, DE LAS HERMANAS Y HERMANOS DEL MUNDO, ES DETERMINANTE PARA CONSEGUIR LA VICTORIA FINAL, Y ESTAMOS CONVENCIDOS QUE ASI SERA.
!NO HAY MAYOR FUERZA EN EL PLANETA QUE LA QUE VIENE DEL PODER DEL AMOR Y LA SOLIDARIDAD HUMANA, MAS CUANDO CON ELLO SE DEFIENDE UNA CAUSA JUSTA Y VERDADERA!!!
!LES DESEAMOS EXITOS EN LAS TAREAS COTIDIANAS QUE TAMBIEN SON CRUCIALES PARA EL DESARROLLO Y EL BIENESTAR DE NUESTRO PAIS!
ESTAMOS SEGUROS QUE EN DIA CADA VEZ MAS CERCANO, ESTAREMOS LOS CINCO JUNTO A TODO NUESTRO PUEBLO, AL FRENTE DE LAS NUEVAS TAREAS Y MISIONES QUE SE DEMANDEN DE NOSOTROS.
!RECIBAN TODO EL AMOR DE LOS CINCO!
!HASTA LA VICTORIA SIEMPRE!
!VENCEREMOS!
ANTONIO
FERNANDO
GERARDO
RENE
RAMON.
OCTUBRE 25,2011.
FCI JESUP, GEORGIA. E.U.
2:26 P.M.

martes, 25 de octubre de 2011

Los argumentos de la Razón

Discurso del Canciller Bruno Rodríguez Parrilla en la 66ma Sesión de la Asamblea General de la ONU

Señor Presidente:

El 13 de noviembre de 1991, esta Asamblea General tomó la decisión de incluir en el programa de su siguiente período de sesiones, el examen del tema titulado “Necesidad de poner fin al bloqueo económico, comercial y financiero impuesto por los Estados Unidos de América contra Cuba”.

Eran los momentos en que Estados Unidos se disponía, con cruel oportunismo, a apretar el cerco contra la isla que luchaba sola, mediante la llamada Ley Torricelli, la cual cercenó nuestro comercio de medicinas y alimentos con las subsidiarias de compañías norteamericanas asentadas en terceros países. Fue ese el acto oficial que hizo notoria y pública la aplicación extraterritorial de las leyes del bloqueo contra terceros Estados.

Hubiera parecido imposible entonces que, 20 años después, esta Asamblea estaría hoy considerando el mismo asunto, tan estrechamente vinculado al derecho de los pueblos a la autodeterminación, al Derecho Internacional, a las reglas internacionales del comercio, a las razones por las cuales existe esta Organización.

Se trata ya de uno de los temas tradicionales de la Asamblea General, que convoca los pronunciamientos más reiterados, con el apoyo más categórico y abrumador, y que muestra con mayor nitidez el aislamiento incómodo del país agresor y la resistencia heroica de un pueblo negado a ceder sus derechos soberanos.

Durante dos décadas, la comunidad internacional ha reclamado invariable y sostenidamente que se ponga fin al bloqueo económico, comercial y financiero de los Estados Unidos contra Cuba. Lo ha hecho por medio de las resoluciones que cada año se aprueban casi unánimemente, de las decenas de apelaciones de Jefes de Estado y de Delegaciones que se refieren al tema en el Debate General de alto nivel de esta Asamblea, y de los pronunciamientos de casi todos los organismos internacionales y agrupaciones de Estados, en particular los de América Latina y el Caribe.

En 1996, la Ley Helms-Burton amplió de forma inédita las dimensiones extraterritoriales del bloqueo y codificó integralmente el “cambio de régimen” y la ulterior intervención en Cuba. Nadie conoce que el “Plan Bush para Cuba”, del año 2004, haya sido dejado sin efecto.

El Informe del Secretario General dedicado a este tema, que recoge los pronunciamientos de más de 160 países y organismos especializados del sistema de las Naciones Unidas, ilustra con abundantes datos la persistencia de esta política criminal y sus efectos directos sobre la población y la economía cubanas.

El daño económico directo ocasionado al pueblo cubano por la aplicación del bloqueo supera los 975 mil millones de dólares, calculado al depreciado valor del dólar frente al oro.

La Convención contra el Genocidio de 1948, en su artículo 2 inciso b tipifica como acto de genocidio la “lesión grave a la integridad física o mental de los miembros del grupo” y en su inciso c, el “sometimiento intencional del grupo a condiciones de existencia que hayan de acarrear su destrucción física, total o parcial”.

Los objetivos del bloqueo han sido, según el memorando del Gobierno de los Estados Unidos del 6 de abril de 1960 “provocar el desengaño y el desaliento mediante la insatisfacción económica y la penuria [...] debilitar la vida económica negándole a Cuba dinero y suministros con el fin de reducir los salarios nominales y reales, provocar hambre, desesperación y el derrocamiento del gobierno”.

Nunca ha ocultado que su objetivo es derrocar al gobierno revolucionario y destruir el orden constitucional que el pueblo soberanamente defiende, lo que el ex Presidente George W. Bush llamó “cambio de régimen” y que ahora alcanza nuevas dimensiones.

Señor Presidente:

A pesar de la falsa imagen de flexibilidad que pretende trasladar el actual gobierno de los Estados Unidos, el bloqueo y las sanciones permanecen intactos, en completa aplicación y se ha acentuado en los años más recientes su carácter extraterritorial. Como rasgo distintivo del período del presidente Obama, se refuerza la persecución a las transacciones financieras cubanas en todo el mundo, sin respeto a las leyes de terceros países ni a la oposición de sus gobiernos.

Cuba continúa sin poder exportar e importar libremente productos y servicios de tipo alguno hacia o desde los Estados Unidos. No puede utilizar el dólar norteamericano en sus transacciones, incluidos los pagos a la Organización de las Naciones Unidas y otros organismos internacionales. Tampoco puede tener cuentas en esa moneda en bancos de terceros países o acceso a créditos de bancos en Estados Unidos, de sus filiales en terceros países y de instituciones internacionales como el Banco Mundial o el Banco Interamericano de Desarrollo.

La prohibición de comerciar con subsidiarias de empresas estadounidenses en terceros países permanece inalterable. Los empresarios de otras naciones interesados en invertir en mi país continúan siendo sancionados, amenazados o incluidos en listas negras.

Los organismos internacionales, los programas y agencias del sistema de la ONU no escapan a esta política, al obstaculizar el gobierno de los Estados Unidos la cooperación que estas entidades prestan a Cuba, incluida la destinada a áreas de sensibilidad extrema.

La incautación, en enero de 2011, de 4 millones 207 mil dólares del financiamiento del Fondo Mundial de Lucha Contra el SIDA, la Tuberculosis y la Malaria, para la ejecución de proyectos de cooperación con Cuba destinados a combatir el síndrome de la inmunodeficiencia adquirida (SIDA) y la tuberculosis, así lo demuestra.

Como resultado de la denuncia de Cuba, el Departamento del Tesoro estadounidense emitió una licencia general en mayo de este año para liberar dichos fondos, la cual vencerá el 30 de junio de 2015. Pero, el hecho mismo de que los recursos de esta organización requieran, para llegar a Cuba, de una licencia del gobierno de los Estados Unidos muestra, además del designio de utilizar a estos programas tan sensibles como rehenes de su política de agresión contra mi país, un flagrante irrespeto a las Naciones Unidas y a las instituciones que la integran.

Varios proyectos de cooperación ejecutados por el Organismo Internacional de Energía Atómica también han sido víctimas del bloqueo.

En medio de la supuesta flexibilización para que viajen a Cuba algunos grupos de norteamericanos, en fecha muy reciente el Departamento del Tesoro denegó también licencias de viajes a Cuba a dos importantes organizaciones no gubernamentales estadounidenses que durante varios años han cooperado con instituciones cubanas en la esfera de la salud. Esta decisión podría impedir que lleguen a su destino donaciones de medicamentos a los que nuestro país no tiene acceso producto del bloqueo.

La verdad es que la libertad de viajar de los norteamericanos sigue cercenada y que Cuba sigue siendo el único destino prohibido.

Señor Presidente:

En repetidas oportunidades los representantes de los Estados Unidos han señalado que el tema que hoy discutimos es una cuestión bilateral y que, por tanto, no debe ser tratada en este foro. Probablemente repitan hoy este falaz argumento.

Los hechos demuestran su inconsistencia. Ciudadanos y compañías de numerosos Estados miembros aquí representados han sido objeto de sanciones por establecer relaciones económicas con Cuba.

¿Qué son, si no, muestra de la extraterritorialidad de dicha política, las multas impuestas el 18 de agosto de 2011 a la subsidiaria de la empresa naviera y de transporte francesa CMA CGM por ofrecer servicios de contenedores a Cuba? ¿Cómo pudieran calificarse las exigencias de la sucursal europea PayPal, empresa encargada de facilitar las transacciones electrónicas por Internet, a la firma alemana Rum Co para que sacara de su página web el ron y el tabaco cubanos?

Los ejemplos sobre la extraterritorialidad, como se aprecia en la respuesta de Cuba contenida en el mencionado informe del Secretario General, son innumerables.

Señor Presidente:

Las declaraciones más recientes sobre Cuba del Presidente Obama han dejado anonadados a no pocos observadores, pero no nos sorprenden. Al ofrecimiento del gobierno de Cuba de establecer un diálogo sobre todos los temas de interés de la agenda bilateral, la respuesta del Presidente Obama ha sido, nuevamente, el rechazo solapado, bajo argumentos absurdos y condicionamientos inaceptables que nunca han funcionado. Su postura es vieja, repetitiva, anclada al pasado, es como si, en vez del Presidente elegido para el cambio, hablaran sus predecesores, incluso republicanos. Parecería desinformado, desconocedor totalmente de lo que hoy sucede en nuestro país, de nuestra historia y cultura.

Cuba hizo el gran cambio en 1959. Al precio de 20 mil vidas, barrió a la dictadura de Batista, el hombre fuerte de los Estados Unidos. Después ha seguido cambiando cada día y debido a su capacidad de renovación es que ha resistido. Otros no resistieron porque no cambiaron y se anquilosaron o se desviaron. Ahora, Cuba cambia y cambiará resueltamente todo lo que deba ser cambiado dentro de la Revolución y del socialismo. Más Revolución y mejor socialismo.

Lo que no ha cambiado durante 50 años, Mr. President, es el bloqueo y la política de hostilidad y agresión de Estados Unidos, a pesar de que no han funcionado, ni van a funcionar.

Pero lo que el gobierno de Estados Unidos quiere que cambie, no va a cambiar. El gobierno de Cuba seguirá siendo “el gobierno del pueblo, por el pueblo y para el pueblo”. Nuestras elecciones no serán subastas. No habrá campañas electorales de 4 mil millones de dólares ni un Parlamento con un 13% de apoyo de los electores. No tendremos élites políticas corruptas separadas de la gente. Continuaremos siendo una democracia verdadera y no una plutocracia. Defenderemos el derecho a la información veraz y objetiva.

Seguiremos conquistando “toda la justicia”. Protegeremos la igualdad de oportunidades de cada niño y no abandonaremos a nadie. No renunciaremos a nuestras políticas sociales. La salud y la educación seguirán siendo universales y gratuitas. Aseguraremos el derecho al trabajo y a la jubilación digna y la seguridad social. Seguirá habiendo salario igual a trabajo igual. Protegeremos a la maternidad y a la discapacidad. El ser humano seguirá siendo lo primero y más importante. Defenderemos nuestra cultura. Continuaremos creyendo en los valores humanos. Será garantizado el ejercicio de los derechos humanos a todos los cubanos.

La economía tendrá que ser eficiente pero seguirá al servicio del hombre. La vida de la gente es y será más importante que los datos macroeconómicos. Las políticas económicas continuarán siendo consultadas al pueblo. Las consecuencias de la crisis económica global se compartirán entre todos. Seguiremos redistribuyendo la riqueza para que no haya ricos ni pobres. No admitiremos la corrupción, la especulación, ni quitaremos el dinero a los trabajadores para salvar bancos. Continuaremos buscando la participación en nuestra economía de compañías extranjeras sin exclusión alguna.

Señor Presidente:

Bastaría revisar lo recientemente divulgado por Wikileaks sobre el trabajo del Departamento de Estado y las Embajadas estadounidenses en todos los países, orientado a entorpecer las relaciones políticas, diplomáticas, económicas, comerciales y de cooperación de Cuba. Resultan vergonzosas por su contenido, las informaciones que revelan la preocupación, interés y persecución a la humanitaria labor de las brigadas médicas de Cuba que prestan su noble y desinteresado servicio a millones de personas en decenas de pueblos hermanos.

Los vínculos familiares y el limitado intercambio cultural, académico, científico que existen entre Estados Unidos y Cuba, demuestran hoy cuán positiva sería la expansión de estos vínculos para beneficio de ambos pueblos, sin las trabas y condicionamientos impuestos por Washington. La propuesta de Cuba para avanzar hacia la normalización de las relaciones y expandir la cooperación bilateral en diversas esferas sigue en pie. Estaría igual en el interés común la solución recíproca de asuntos humanitarios pendientes.

¿Por qué el gobierno del presidente Obama mejor no se ocupa de los problemas de los Estados Unidos y nos deja a los cubanos resolver en paz y tranquilos los nuestros?

Uno de los Cinco luchadores antiterroristas cubanos acaba de cumplir, hasta el último minuto, los 13 años de su injusta condena, pero se le impide regresar a Cuba a unirse con su familia, mientras los otros cuatro permanecen bajo cruel e injusta prisión política. La burda corrupción del proceso legal y la conducta ilegal del gobierno, en relación con este, es ampliamente conocida y ha sido bien documentada. ¿Por qué no los liberan en un acto de justicia o, al menos, humanitario?

Señor Presidente:

Debo trasmitir la profunda gratitud del pueblo de Cuba a todos los países que durante 20 años han expresado con su voz y su voto la necesidad de poner fin a las sanciones unilaterales más injustas, prolongadas y abarcadoras de la historia, que tanto han afectado a millones de cubanos.

En nombre de Guillermo Domínguez Díaz (16 años), Ivis Palacio Terry (18), Randy Barroso Torres (17) y Adrián Izquierdo Cabrera (12), que han sufrido cirugías conservadoras y pasado meses enyesados en sus camas por no disponer de prótesis extensibles pediátricas (endoprótesis tumoral extensoras), las cuales se producen en los Estados Unidos o bajo sus patentes, y de María Amelia Alonso Valdés (2), Damián Hernández Valdés (4) y Dayán Romayena Lorente (12), quienes padecen de tumores del sistema nervioso central y necesitan tratamiento con Temodal que es norteamericano y está protegido por su patente;

En nombre de mi pueblo abnegado, generoso, optimista y heroico, y para bien de la comunidad de naciones y del “equilibrio del mundo”, les solicito apoyar el proyecto de resolución L.4 titulado: “Necesidad de poner fin al bloqueo económico, comercial y financiero impuesto por los Estados Unidos de América contra Cuba”.

Muchas gracias.

sábado, 17 de septiembre de 2011

¿Que liberen a Gross? ¡Que liberen a los Cinco!

Lázaro Fariñas
Rebelión


Siempre se ha dicho que el hombre es el único animal que choca dos veces con la misma piedra. Si lo anterior lo aplicamos a las declaraciones de los políticos norteamericanos en relación con Cuba, se confirma la regla. Bill Richardson es el último ejemplo . El hombre llegó a La Habana en una visita privada y todo hace indicar que llegó con ínfulas de pro cónsul. Por lo menos por las declaraciones que le hizo a la prensa en las terrazas del Hotel Nacional , dio la impresión que se sentía con todo el poder del mundo para chantajear al gobierno revolucionario. Richardson llegó a afirmar que no se iba de Cuba hasta que no viera al señor Alan Gross, el norteamericano que fue condenado por los tribunales cubanos por realizar actos condenables por las leyes cubanas vigentes. El ex gobernador no solo exigía que lo dejaran ver al recluso, sino que al mismo lo denominaba como un "rehén" de las autoridades cubanas. Bueno, pues se tuvo que ir de Cuba tal y como había llegado, más tranquilo que estate quieto.

Hace muy poco, también el presidente Barack Obama y la Secretaria de Estado Hillary Clinton exigían al gobierno cubano que pusiera en libertad al señor Gross. ¿Exigirle al gobierno cubano? Sería comprensible que se le pidiera al gobierno que preside Raúl Castro que, por motivos humanitarios, se deje en libertad a Gross, de igual modo que se le ha pedido al presidente Obama que también por motivos humanitarios deje en libertad a los cinco cubanos que llevan trece años presos en las cárceles estadounidenses. Con notables diferencias entre un caso y el otro, tanto los jóvenes cubanos como el no tan joven Gross fueron hallados culpables por los tribunales norteamericanos y cubanos, respectivamente.

En primer lugar, los cubanos fueron condenados por espiar a las organizaciones terroristas anticubanas de Miami con el propósito de evitar acciones por parte de las mismas con la intención de crear el terror en Cuba para que de esa manera fuera derrocado el gobierno de la isla. Gross fue hallado culpable por distribuir teléfonos satelitales entre los individuos residentes en Cuba que también buscan el derrocamiento del gobierno revolucionario.

Mirado de esa manera, los cubanos fueron condenados por evitar actos terroristas en Cuba y el norteamericano fue condenado por repartir instrumentos que bien podrían ser utilizados para llevar a cabo esos tipos de actos en las calles cubanas. Ninguno fue condenado por tratar de derrocar el gobierno de los Estados Unidos, ni de intentar llevar a cabo actos en contra de la seguridad de este país. La principal diferencia entre un caso y el otro está en las condenas que recibieron. Los cubanos antiterroristas recibieron desde 15 años de prisión hasta dos cadenas perpetuas, ya llevan 13 presos, mientras que el norteamericano solo fue sentenciado a 15 años, de los cuales aun no ha llegado a cumplir dos. Observando ambos casos objetivamente tenemos que decir que los tribunales cubanos fueron mil veces más clementes y humanitarios que su contraparte norteamericana, incluso, que a Gross lo han tratado mil veces más humanamente en prisión que lo que han sido tratados los jóvenes cubanos. Esa es una verdad innegable.

Como bien se sabe, los cubanos fueron arrestados por haber tratado de buscar información antiterrorista entre los terroristas de origen cubano y como bien quedó demostrado en el juicio, en ningún momento trataron de hacerle daño a los Estados Unidos o a su seguridad interna. Muchos que han sido arrestados en este país por haber estado espiando para otros han sido condenados a penas mucho más ligeras que estos jóvenes cubanos, con los cuales los tribunales norteamericanos han sido despiadados.

Hace unos días, leí un artículo que publicó el periódico USA Today del periodista DeWayne Wickham en el cual mencionaba el caso de los 10 espías rusos que fueron arrestados el año pasado por el FBI y que después de ser presentados en la corte federal acusados de actuar como agentes de un país extranjero, en poco más de una semana fueron canjeados por cuatro espías británicos y norteamericanos que estaban presos en Moscú. El periodista se pregunta el por qué no se ha hecho un canje entre los cinco cubanos por el norteamericano. También yo me lo preguntaría.

Si el gobierno cubano quiere la libertad de los cinco compatriotas y el gobierno norteamericano quiere la libertad de Gross, no hay nada que impida que ambos gobiernos puedan hacer lo que se hizo con los rusos y los norteamericanos e ingleses. Ya que no se liberan por motivos humanitarios, pues que se liberen a través de un canje de conveniencia. Estoy casi seguro que el gobierno cubano lo aceptaría. ¿Qué razón puede existir para que el gobierno de los Estados Unidos no lo haga?

martes, 5 de abril de 2011

Hoy soy mucho más Jurista que ayer



He mirado durante horas esta foto.

La he mirado durante horas, las interminables ocasiones en que he leído este discurso de Alarcón.

Hoy he recordado las numerosas ocasiones en que, convocado por nuestra Organización, he participado en debates y análisis sobre la necesidad de fortalecer la conducta y el comportamiento ético de nuestros juristas.

En la foto, el abogado norteamericano Leonard Weinglass ocupa los últimos minutos de su vida, en la Sala de Terapia Intensiva de un Hospital, sufriendo un doloroso y fulminante cáncer, en revisar los documentos que se presentarían en la defensa de nuestros Cinco Héroes.

He leído como vivía en un apartamento modesto quien pudo vivir en un palacio.

He leído como asumió gratis sus más importantes casos quien pudo ser millonario.

He leído como solo aceptó que le pagaran a duras penas algunos gastos de transporte, hospedaje, alimentación, que había que reñirle para que no se hospedara en moteles baratos sin las condiciones adecuadas, que presentaba siempre una lista minuciosa de todos sus gastos.

He leído que se descubrió su enfermedad en Cuba durante una reunión de trabajo, y se negó a ir al Hospital hasta que no cumpliera el compromiso de reunirse con una de las esposas de nuestros compañeros.

He leído que los médicos cubanos le prohibieron terminantemente partir dada la gravedad de su enfermedad, y contra todas las órdenes partió a Estados Unidos porque en el teléfono de su casa esperaba una llamada de Gerardo.

Hoy aprendí que la honradez, la honestidad, la conducta ética, la humildad, son en realidad las virtudes que marcan nuestra profesión, y no las manchas de los que no la respetan.

Hoy más que nunca, gracias a este hombre que no es cubano, que no es comunista, que seguramente no compartía mis ideales políticos, me he sentido absolutamente orgulloso de la profesión que un día, hace poco más de diez años, escogí para mi vida.

Hoy soy mucho más Jurista que ayer.

EL SEXTO HÉROE

Palabras de Ricardo Alarcón en Homenaje al abogado Leonard Weinglass. ICAP, Marzo 26, 2011

Compañeras y compañeros:

En estos mismos momentos, deben estar reunidos allá en Nueva York, en la vivienda de Leonard Weinglass, sus amigos y compañeros más cercanos, en un apartamento que, sin exagerar, es la mitad del espacio que va desde este micrófono hasta el compañero que está de pie allí. Ahí fue donde vivió una persona que pudo haber vivido en la opulencia, que pudo haber ganado mucho dinero, como suele suceder con los abogados cuando defienden a los poderosos, cuando cobran muy bien cobrado sus horas de servicio. En ese apartamento, que allá también llaman estudio, apartamentos de una sola habitación, donde estaba su cama, su mesa de trabajo, su máquina de escribir, su teléfono y las cosas elementales que son necesarias para la vida humana, sin embargo era un hombre muy feliz, no creo que nunca haya pensado en mudarse para un lugar diferente.

Ustedes vieron en la pequeña porción de la entrevista que le hizo acá en la televisión cubana el compañero Miguel Álvarez y que espero que se vuelva a retransmitir la semana próxima, que Weinglass dijo algo, que yo he mencionado otras veces, que para él era un honor, un privilegio, ser uno de los integrantes del equipo de defensa de los cinco compañeros. Quisiera destacar ese aspecto para que se comprenda la dimensión, la trascendencia, la significación de lo que él hizo como abogado.

Weinglass se incorporo a esta batalla después que tuvo lugar el juicio de Miami en el cual el no participó, un juicio que, como se ha dicho muchas veces, fue el más largo de la historia de Estados Unidos, uno de los más complicados. Yo les aseguro a ustedes que no es nada fácil contratar a un abogado para que se incorpore a un caso cuando ya éste se encuentra en la fase de apelación, sin haber participado de modo alguno en la etapa anterior, la etapa sustantiva, además sin poderle pagar mucho dinero.

En el año 2002, después que fueran sentenciados los compañeros, comenzó la batalla de movilización de la opinión pública, de divulgación, de explicación y paralelamente el proceso apelativo. Yo recuerdo que conversamos con mucha gente, amigos del sector jurídico norteamericano progresista, capaces de apoyarnos en esta lucha y además que tenían alguna información al respecto. El consenso unánime era que hacía falta buscarse un buen abogado. Por aquellos días Weinglass vino a la Habana y le propusimos que se incorporase al equipo de defensa. Por razones de salud a uno de los abogados originales, -recuerden que ellos fueron defendidos por abogados de oficio, designados por el tribunal, que todos ellos tenían otras funciones, otras tareas y este era apenas un caso más, -se le dificultaba continuar defendiendo a su cliente, el compañero Antonio Guerrero, y entonces se tomó la decisión de sustituirlo.

Se lo propuse a Leonard Weinglass y él me dijo lo mismo que repitió después en la entrevista. Él no me dijo me tienen que pagar tanto, o tengo que ver como resuelvo porque tengo otros casos, él prácticamente dejó todo o casi todo aquello que lo ocupaba en ese momento, casi todo porque siguió siendo el representante legal de una compañera que se encuentra ahora en libertad que es la hija de quien fue su jefe y mentor, Leonard Boudin.

Lo único que me dijo fue: “para mí es un honor, ustedes me están brindando un gran honor al haber pensado en mi”. En realidad nosotros no fuimos los primeros ni los únicos que pensamos en él. Por aquellos días también se apareció por la Habana una compañera dirigente política afroamericana con la que discutimos el caso, Ella me dijo: “Ricardo estos muchachos necesitan desesperadamente alguien que los defienda”. En Estados Unidos, hay que buscar a un abogado, porque un abogado no es sólo el que presenta papeles, es también el que va a un acto el que da una conferencia, el que explica, el que trata de convencer, tiene que ser el que hable en lugar de sus representados, que generalmente no pueden hacerlo y eso francamente unido a la decisión política de ocultar el caso ha hecho muchísimo más difícil la divulgación que es indispensable para poder organizar un movimiento político que los libere, que va a ser la única solución para este problema. “Necesitan a Lenny” fue lo que ella me dijo. Le expliqué que casualmente hacía unos días yo había hablado con él y se lo había propuesto, y a esa mujer afroamericana se le fue iluminando el rostro y una gran sonrisa se lo cubrió, porque estaba convencida y así me lo dijo: “Ahora si ganamos”.

Porque lo que hacía falta era eso, hacía falta que Lenny asumiera, que se metiera en esta batalla en la forma en que lo hizo, no solamente con los argumentos legales, con el trabajo profesional típico de un letrado, sino sobre todo en la calle, mas allá de las salas del tribunal, para tratar de llegarle a la gente, a la opinión pública, que es donde hemos enfrentado y seguimos enfrentando el mayor obstáculo, el que hasta ahora ha determinado la suerte de este caso. Pero ese hombre, que tuvo que comenzar leyéndose decenas de miles de páginas, no solamente de las actas del tribunal, sino también no se qué cantidad de documentos, mociones, testimonios, etc., para poder entender y comprender algo en lo que él no había estado presente, le dio una solución muy importante a esta lucha. Él fue el que encontró los argumentos para apelar el caso ante la corte de Atlanta, el que redactó esa petición a nombre de los Cinco, porque él siempre fue el abogado de Antonio, pero también de Ramón, René, de Fernando y de Gerardo, de todos ellos y no nos cobró lo que hubiera cobrado cualquier abogado de este mundo por defender a uno solo de esos compañeros.

Yo debo decirles que prácticamente nosotros lo que hacíamos era pagarle los gastos que significaban para él asumir esta labor, digamos cuando se trasladaba a dar alguna conferencia, a participar en un congreso, cuando iba a Washington o a California para hablar en un mitin, de todos esos gastos nos mandaba las descripciones mas meticulosas y si algo teníamos que discutir con él constantemente era para que gastara más, para que no se alojara en moteles tan humildes, tan incómodos, para que no viajara en los medios de transporte más baratos, porque queríamos , por interés incluso hasta de la solidaridad, tratar de salvarlo, de ayudar a que él estuviera en las mejores condiciones para cumplir su misión más importante.

Lenny no fue a morir en Nueva York a uno de los grandes hospitales, con tecnología muy avanzada, donde van las personas de clase media alta para arriba, los abogados, él fue al hospital clásico del Bronx, al hospital de los negros, los puertorriqueños y estaba de lo más feliz cuando nos comunicó que iba a ingresar en el Centro Médico Montefiori. Pero para que llegara a entrar ahí hubo que seguir peleando y discutiendo mucho con él. La terrible enfermedad que tenía se le descubrió aquí en la Habana, donde él estaba en una reunión, una reunión que empezó por la mañana y duró hasta ya avanzaba la noche y entonces fue que él confesó que se sentía muy mal. Entonces lo llevamos para el Hospital, más tarde regresa acompañado por el médico que lo había examinado, quien me dice que este hombre estaba muy, muy grave, que había que operarlo con toda urgencia. Pero Lenny se negó a quedarse en el hospital, porque tenía que reunirse al día siguiente en la mañana con Adriana Pérez y dijo: “No, mientras no me reúna, yo no voy a ningún hospital ni hago nada, porque yo quedé en eso con ella y eso es muy importante”. Negociamos con él: “Correcto, te reúnes con Adriana pero sales de la reunión para el hospital para que te hagan las otras pruebas para poder confirmar el diagnóstico”. Así lo hizo, entonces después quien me vino a ver fue el director del hospital, para decirme: “Ricardo, es una responsabilidad muy grande el que este hombre salga del hospital y vuelva a Nueva York, pero él dice que se va”. ¿Y porque él dice que se va? Porque había quedado con Gerardo en hablar por teléfono, de su teléfono en Nueva York, porque estaba dando los últimos pasos en la etapa más reciente de la apelación de Gerardo. Dijo “No, yo me voy para allá” y se fue.

Llegó a Nueva York y tratamos de seguir monitoreando en la distancia cómo hacía las cosas e insistiéndole, “acaba de meterte en el hospital”. No lo hizo hasta que tuvo resuelto lo de la presentación del memorando de Tony. En el hospital confirmaron el mismo diagnóstico, todavía peor, porque encontraron que ese tumor de 8cm que le diagnosticaron aquí, ya había hecho metástasis en el hígado ubicado en el páncreas, y cualquier médico puede decir que eso es mortal. Inmediatamente, lo operaron con la intención de extirparle el tumor pero tuvieron que cerrarlo, los médicos norteamericanos llegaron a la conclusión de que no había nada que hacer.

Desde entonces él estuvo soportando el cáncer, no solamente el más peligroso y mortífero, sino el más doloroso según me han dicho especialistas del tema. Si se visita el sitio que sus amigos crearon para recibir los mensajes de solidaridad durante su estancia en el hospital, ahí van a ver la última foto posiblemente que se le tomó en vida, lo van a ver ahí en la unidad de cuidados intensivos y lo van a ver estudiando los papeles correspondientes a Gerardo y a Tony. Cuando lo que le quedaban eran minutos prácticamente para la fase final, lo que estaba haciendo era ocupándose de la defensa de nuestros compañeros.

Menciono todo esto porque yo creo de verdad, si somos serios, que el momento es para tratar de imitarlo, porque todos debiéramos aplicar aquello de Silvio, de ser “mucho menos egoístas”, de entregarnos un poquitico más, ver qué cosa práctica podemos hacer, que lección, que mensaje podemos sacar de la conclusión de esta vida tan admirable como fue la de Lenny.

El caso Ramírez, del que ya casi nadie habla, que ya casi ni se menciona, no existe. La propaganda mediática enemiga logró disolverlo como les hacía falta. Recuerden que los compañeros fueron condenados y sentenciados en el 2001, recuerden que uno de los argumentos que la defensa había usado desde el principio y por la que habían peleado aquellos abogados de oficio desde el comienzo, era lograr que la sede del juicio no fuera Miami, que se trasladara para otro lugar para evitar los prejuicios y el ambiente hostil que prevalecen en esa ciudad.

En el año 2002, al año siguiente de la condena de nuestros compañeros, el gobierno norteamericano pidió que cambiaran la sede de un juicio que había interpuesto el señor Ramírez, funcionario del servicio de Inmigración, contra la directora de ese servicio, que no se hiciera ese juicio en Miami porque en Miami era imposible realizar un juicio equilibrado, imparcial, justo, en algo relacionado con Cuba. El gobierno de Estados Unidos, el mismo gobierno que estuvo exigiendo que el juicio de los cinco tuviera lugar en Miami, diciendo que ese era el lugar ideal, perfecto, cosmopolita que no había problema ninguno, como si secuestrar a un niño de seis años fuera algo natural, ahora solicitaba cambio de sede para un caso relacionado de forma indirecta precisamente con el secuestro de Elián González. Ramírez demandaba a la directora de inmigración por haber sido objeto de discriminación en su empleo durante el proceso de devolución de Elián a su papá. Explico esto para que se tenga una idea de que ni siquiera una diferencia laboral se puede discutir en Miami si se relaciona con Cuba.

Ese caso se resolvió, negociando el gobierno con el señor Ramírez, pero sirvió como antecedente, como el fundamento que Lenny usó para probar la prevaricación del gobierno norteamericano, su mala conducta: La ciudad que era un paraíso para juzgar el caso de los Cinco se convirtió en el infierno cuando era ese gobierno quien tendría que enfrentar a un tribunal.

El tribunal de apelaciones de Atlanta sí comprendió los argumentos de Weinglass, y en el año 2005 alcanzamos un fallo histórico, que también los medios se han encargado de hundir en el olvido. Los tres magistrados del panel de Atlanta por unanimidad dijeron que en esa ciudad era imposible hacer un juicio justo a estos compañeros, dijeron que en Miami se había dado “la tormenta perfecta” de prejuicios y hostilidad contra esos acusados y en consecuencia declararon nulo y sin valor ese juicio. Los tres jueces anularon las condenas y las sentencias sin una voz discrepante.

En el sistema norteamericano ese es el final de una apelación, teóricamente se le puede pedir al pleno del tribunal que revise lo que tres de sus jueces han decidido pero eso es sumamente raro que ocurra, más raro aún cuando se trata de una decisión unánime, no hubo discrepancia entre los tres jueces, los tres dijeron lo mismo, sin un matiz de diferencia. Para los tres había sido “una tormenta perfecta”. Imagínense ustedes si todas las apelaciones pasaran por los dos escalones el trío de jueces y después el pleno, en la práctica todas las apelaciones fueran vistas por todos los jueces de Estados Unidos, por eso es que la ley norteamericana establece que como norma el gobierno no cuestiona los fallos de los paneles de las Cortes de Apelaciones, salvo que haya razones de excepcional importancia. Bueno en este caso aparentemente las tuvo el fiscal general de Estados Unidos, del cual ya casi ni se habla, aquel famoso Alberto González, que fundamentó teóricamente y justificó las torturas , que justificó la prisión de Guantánamo y las torturas allá en Afganistán. Ese hombre cuestionó y presionó para lograr que una mayoría de los miembros de la Corte de Apelaciones echara abajo lo que sus tres colegas habían determinado, algo completamente inusitado en la historia legal de los Estados Unidos.

Pero siguió la batalla en Atlanta, siguió el proceso después hasta el Supremo. Hubo una bifurcación porque se consiguió al menos que la Corte de Apelaciones reconociera que había sido injusta y excesiva la sentencia impuesta a tres de los compañeros Ramón, Antonio y Fernando y decretaran un proceso de resentencia, en el cual Lenny logró algo muy importante que fue quitarle a Tony la cadena perpetua que tenía. Cualquier día que le pongan de prisión a Tony o a cualquiera de ellos es injusto, pero al menos le quitaron de encima ese terrible peso de estar toda la vida en prisión.

Quería destacar esa contribución de Leonard Weinglass, el caso Ramírez, la victoria en la corte de apelaciones de Atlanta en el 2005. Después, en la etapa más reciente de esta lucha, él se ocupo especialmente de algunos temas que yo he mencionado en otras ocasiones pero que siempre han encontrado el silencio mediático como respuesta.

Ustedes saben que el cargo peor que enfrenta Gerardo Hernández Nordelo es nada más y nada menos que conspiración para cometer asesinato en primer grado, que significa asesinato con premeditación y alevosía. Es fundamental lograr que en alguna etapa del proceso legal se reconozca que eso es falso. Que esa acusación es falsa no hay la menor duda, está más que demostrado y lo vamos a seguir demostrando. Gerardo no tuvo absolutamente nada que ver con el incidente del 24 de Febrero de 1996, en el cual perdieron la vida cuatro personas como consecuencia de las provocaciones de grupos terroristas de Miami contra Cuba.

En aquella ocasión el gobierno norteamericano dijo que el incidente había ocurrido fuera del espacio territorial cubano. Como eran aviones de matricula norteamericana y el incidente había ocurrido, supuestamente, en aguas internacionales, lo que la ley norteamericana reconoce como jurisdicción especial de los Estados Unidos, un tribunal norteamericano tiene jurisdicción para juzgarlo. Pero no tienen ninguna autoridad para hacerlo si el hecho ha ocurrido fuera de la jurisdicción de Estados Unidos.

Entonces una parte muy importante de la discusión era dónde había tenido lugar el incidente. Desde el juicio, que culminó hace diez años, se presentaron dos puntos de vista: los que decían que los radares cubanos lo mostraban dentro del espacio territorial cubano y los que decían que eran informaciones contradictorias, discutibles, que había sido muy cerquita de Cuba pero de el lado de allá. En medio de aquello, un experto norteamericano hace una observación interesante: “¿por qué no buscamos la imagen de los satélites? Las informaciones de los radares discrepan, hay diferencias entre lo que dicen los radares cubanos y los norteamericanos, pero bueno, allá arriba tenemos montones de satélites de Estados Unidos que están registrando y tomando imágenes de todo eso, seguramente tienen que tenerlo, ¿por qué no buscan esa imagen y ya?”.

La defensa hizo suya esa posición y le pidió al tribunal que se lo solicitara a la NASA. El gobierno, fíjense que cosa más curiosa, el gobierno que es el dueño de esas imágenes dijo que no, se negó a que esas imágenes fueran mostradas, fueran presentadas y la jueza, que muchas veces sentía especial inclinación en coincidir con el gobierno, le dio la razón y no se presentaron las imágenes. Desde entonces la defensa de Gerardo Hernández ha estado solicitando que sean presentadas esas imágenes , no son imágenes de la fuerza aérea cubana, no son imágenes del gobierno cubano, son imágenes del gobierno de los Estados Unidos, que sólo ellos han visto , pero que se han negado a que las pueda ver un tribunal. Todavía están enfrascados en algunos intentos administrativos y judiciales para ver si se obliga a las autoridades a presentar esas evidencias.

Hoy estamos reunidos aquí un grupo de personas inteligentes, no creo que haga falta pedirles a ustedes que hagan un gran esfuerzo intelectual para preguntarse, por qué el gobierno de Estados Unidos se niega a que alguien pueda ver las imágenes que tomó una agencia federal de Estados Unidos sobre el lugar del incidente del 24 de Febrero. Me atrevo a sospechar que es porque esas imágenes no prueban la posición norteamericana sino la cubana, sino, ¿para qué las han mantenido ocultas por quince años, porque el incidente había ocurrido cinco años antes de la culminación del juicio de los compañeros.

Lenny dedicó mucho tiempo en los últimos años de su vida a orientar, a asesorar, a ayudar a varias organizaciones norteamericanas que llevan rato reclamando a esas agencias norteamericanas y al gobierno federal, incluyendo en los tribunales, que sencillamente muestren esas pruebas que tienen escondidas. Son quince años en los cuales la propaganda norteamericana no se ha cansado de decir que el incidente ocurrió en aguas internacionales, pero nadie se ha tomado el trabajo de recordarles que llevan quince años ocultando esas imágenes satelitales. Ese es uno de los elementos que está contenido en el Habeas Corpus que se presentó a favor de Gerardo y al cual Weinglass le dedicó mucho tiempo.

El otro elemento tiene que ver con “la tormenta perfecta” , o sea con el ambiente creado en Miami de hostilidad, de odio, de prejuicios contra esos cinco acusados. A lo largo del juicio hubo montones de momentos en lo que se produjeron incidentes que involucraron a los llamados medios periodísticos de Miami. Ahí están las actas. Hubo momentos en que la jueza le dijo a la fiscalía que los miembros del jurado estaban atemorizados, que sentían miedo de esos llamados periodistas que los perseguían con sus cámaras, que iban a filmar las chapas de sus automóviles para mostrarlas por televisión, y así ubicar quién es el jurado, dónde vive, cómo se llama, dónde trabaja. Los persiguieron incluso por los pasillos del edificio del tribunal, la jueza le rogó al gobierno norteamericano, o sea a la fiscalía, que por favor hiciera algo para que eso no continuara. Ella no declaró nulo el juicio, no ordenó la libertad inmediata de los cinco acusados y el fin de toda esa farsa, que era lo que debió haber hecho, pero al menos se quejó.

Lo que nadie sabía , ni la jueza , ni los acusados, ni sus defensores era que toda esa campaña, toda esa labor delincuencial de los llamados periodistas de Miami era articulada, armada, pagada por el gobierno federal de Estados Unidos de América , lo que significaba otra razón más para declarar nulo y sin valor el fraudulento proceso. Eso se descubrió en el año 2006, después que había pasado la etapa de apelación cuando ya lo que nos quedaba era solamente la apelación colateral.

En el 2006 aparecen las primeras pruebas de esta actividad, están ahí en el documento firmado por Weinglass y que fue presentado para apoyar el Habeas Corpus de Antonio Guerrero: cuarenta mil dólares al señor Montaner, veinticinco mil a no sé quien, veinte mil a otro, diez mil a este al otro, esto es solamente una parte de lo que se ha demostrado, pero se sabe que hay el doble de personas involucradas en esos pagos. Quienes lo descubrieron, algunos compañeros y compañeras de la solidaridad en Estados Unidos, llevan cinco años, cinco años con todos sus meses y con todos sus días, tratando de obligar al gobierno federal a que muestre todo lo demás que mantiene oculto, a cuántos periodistas más les pagó, dónde están los contratos con que se les pagaba y cuáles eran los términos a los que ellos se comprometieron, qué tenían que hacer para recibir ese pago, etc. Cinco años en los que por supuesto el gobierno norteamericano se ha negado a entregar la información que tiene sobre ese aspecto tan decisivo para el caso.

Está muy bien argumentado en el escrito presentado por Weinglass a nombre de Tony que esta acción por parte del gobierno hacía imposible cualquier idea de justicia. Se supone que la imparcialidad de la justicia está en que el acusado y el acusador se enfrentan en condiciones de igualdad ante un tribunal, presentan las pruebas, el tribunal las examina y se llega a una conclusión. Pero si el acusado tiene que defenderse además en el barrio, en la calle, en las esquinas, del ambiente que le crea el acusador, eso evidentemente vicia totalmente todos los principios de justicia que supuestamente rigen en aquel país. No es de extrañar que los medios, no sé si por solidaridad profesional, oculten eso, porque ahí está uno de los principales argumentos para ganar el caso: ellos fueron víctimas de una operación deliberadamente concebida por el gobierno para condenarlos de antemano.

En el documento presentado a nombre de Tony hay una prueba que es aplastante a mi juicio. Hay muchas, pero hay una que a mí me llama la atención, en un momento del juicio la fiscalía trata de introducir un material del grupo terrorista que había estado involucrado en el incidente, la defensa se opuso aduciendo que eso iba a prejuiciar a los miembro del jurado contra su defendido, la jueza le dio la razón a quien entonces era el abogado de Gerardo y prohibió que el material se presentara. Terminó la sesión del juicio, se fueron los jurados para su casa y en cuanto encendieron la televisión vieron en el canal 23 ese material. ¿Quién se lo dio a ese medio de televisión? ¿De dónde lo sacaron si la jueza decidió que no podía ser mostrado? Este es sólo un ejemplo, se puede hacer una relación interminable de momentos en los cuales estaba más que justificada la anulación completa de aquel juicio.

En los últimos días Lenny estaba empeñado en que estos temas que les he mencionado se presentaran del modo más convincente , más sólido ante el tribunal, ahora que está en la etapa de las acciones extraordinarias del llamado Habeas Corpus que hasta ahora ha sido presentado por Gerardo y por Antonio. Yo no sé cuál de los documentos estaba leyendo en esa foto, pero lo que sí nos ha dicho la compañera más cercana a él, la que estuvo siempre acompañándolo en estos días, es que era un documento relacionado con la apelación de los compañeros.

Yo creo que si queremos de verdad rendirle, no tributo ni homenaje, pero sí cumplir con él, comprometámonos a hacer un poquitico más para que estas cosas, esas grandes lagunas, esos misterios que la gente no conoce, que los medios no les permiten conocer, lleguen al conocimiento de todos, porque mientras no los descubra no será capaz de movilizar y de actuar para que se haga justicia.

Nosotros nos hemos acostumbrado a hablar de los Cinco Héroes, pero en realidad son seis. Lenny era el sexto héroe, él no estaba prisionero en las cárceles del imperio, pero entregó su vida para salvar a los otros cinco y lo menos que merece es que nosotros tratemos de imitarlo aunque sea un tantito así.

Muchas gracias.

martes, 15 de marzo de 2011

NO NOS ENTENDEMOS






  














NO NOS ENTENDEMOS…
(A propósito de la visita de los Agentes Emilio, Vladimir y Raúl a Ciego de Ávila)
 
Quiero pensar que hacía sol…
Quiero pensar que después de diez años de desgastante contienda, en el pecho del Titán latía con mas fuerza el Honor que la decepción, pesaba más la altura de las ideas por las que tantas balas tenía ya en el cuerpo, que la traición, la cobardía, la desidia, el regionalismo, las indisciplinas y los intereses personales que sembraron discordias y desalientos en los protagonistas de aquella guerra, echando por tierra la sangre de tantos cubanos.
Quiero pensar que en los rostros curtidos por tantas Batallas de Moncada, Figueredo, Crombet, Rius Rivera, Quintín Banderas, Martínez Freyre, José Maceo y muchos más de sus hombres que ahora lo miraban, latía el orgullo de saberse tocados por la Historia, testigos de compartir con alguien excepcional, un momento excepcional.
No es difícil imaginar las emociones que los embargaban cuando el General le dijo simplemente al Capitán General que venía pidiendo la rendición sin Independencia y sin el cese de la odiada esclavitud:
“No nos entendemos…”
Quiero pensar que en esta otra soleada tarde de marzo, ciento treinta y tres años después, un orgullo similar embarga a los jóvenes que me rodean.
Emilio, Vladimir, Raúl, apenas tres nombres que evocan al tío combatiente de las arenas de Girón, al Lenin de aquella Escuela Vocacional donde sin dudas la savia del patriotismo y el amor regó el árbol de entereza y sacrificio que ya crecía en el pecho, y al General de Ejército de tantos combates que inspiró y dio fuerzas en la soledad acompañada que solo el Agente conoce.
Carlos, Moisés, Dalexy, tres hombres que hoy se incorporan con humildad al ejército del Pueblo, porque ya no hace falta esconderse detrás de un rostro enemigo, porque ya otros ocuparon su lugar, porque la Revolución sigue estando segura.
Tres hombres a los que antecedieron miles, a los que seguirán miles, mirando con sencillez a los que los rodean, enseñando, marcando el camino.
Quiero pensar que los jóvenes que me rodean en esta tarde se llevan a su casa un pedazo de ese orgullo que yo también sentí, y que esta noche, un instante antes de que el sueño le venza, pensarán tal vez: “hoy fui tocado por la Historia”
No importa que la pelea sea tan dura, no importan los millones que inexplicablemente (para algunos) se estrellan una y otra vez frente a la serenidad y la seguridad de un pueblo que, como dijo una vez Camilo, “no se dejará confundir”.
Quiero pensar que en esta tarde memorable los jóvenes que me rodean aprendieron que no es necesario esperar una batalla final contra el enemigo donde se decida el futuro que daremos a nuestros hijos, porque esa batalla ya comenzó, y el enemigo sigue siendo inteligente, poderoso, tenaz, y no está siempre a 90 millas, está muchas veces dentro de cada uno de nosotros mismos, en cada torpeza, en cada muestra de indolencia, en cada superficialidad, en cada momento de inercia, en cada cosa negativa que no tenemos el valor de combatir.
Quiero pensar que en los tiempos difíciles que vendrán, en los que muchas concepciones hasta hoy inamovibles tendrán que ser revisadas y modificadas, en pos del bien mayor de mantener viva la esperanza que es hoy Cuba como alternativa a un Sistema autodestructivo que lleva el mundo inexorablemente hacia el abismo,  Emilio, Vladimir, Raúl, o lo que es lo mismo, Carlos, Moisés, Dalexy, serán también Titanes a los que miramos con orgullo.
Quiero pensar que yo y los jóvenes que me rodean tendremos, cuando haga falta, el valor de mirar de frente al enemigo que nos invite a rendirnos, y seguirle diciendo, con esa misma fuerza que aquella tarde en Baraguá:
No, no nos entendemos…..